them, de Joyce Carol Oates (Wonderland Quartet #3)

 


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♫♫♫  The Rip - Portishead  ♫♫♫
 
 
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Reflexiones sobre la marcha 3
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"He was to recall his childhood in flickers and flashes, as if it were a movie made before his time, one of those old halting, comic films in which foolishly dressed people could have felt no pain, no anguish. Had he, Jules Wendall, ever been a child? Really a child? In the sense in which other people have been children? And what did it mean, to have been a child?"


Cuenta Joyce Carol Oates que como cronista de la sociedad americana la han criticado muchas veces por no establecerse en juez de sus personajes, ni sobreexplicar los mensajes de sus historias o dejar los finales completamente abiertos. Se puede decir que la vida misma es asi, no? No hay cierre, hay un continuo evolucionar, sobrevivir, un ir hacia adelante, así que de alguna forma la Oates está haciendo esto. Es cierto que muchas veces parece que todo se quede en el aire pero normalmente eso viene de nuestra necesidad de que las historias concluyan, que todo quede atado y bien atado. Con la Oates no suele ocurrir esto, y si hemos prestado atención a las pequeñas señales, todo queda atado, solo que será el lector el que lo tiene que dejar atado en su imaginación. También dice ella que sumergirse en las vidas de otros, habitarlas, es un acto de compasión e incluso de amor y cuando se ama (como ella ama/habita sus personajes) el juzgarlos no tiene cabida. "Los significados de una novela pueden ser tantos y tan innumerables e insondables como sus lectores". Expondrá a sus personajes, los desnudará, los enfrentará a dilemas, pero las respuestas complejas e incluso trágicas, quedarán para que el lector las desentrañe. Y en esta tercera entrega del Cuarteto Wonderland, una vez más, la Oates enfrenta a sus personajes a la realidad después de que las ambiciones románticas e idealizadas que tuvieran estos jóvenes americanos se encontraran cara a cara con la vida real. Ya el título, them está sentando la base de adónde se quiere dirigir esta autora, porque este ellos/them son los americanos que viven al margen del sueño americano: pobres, que vienen de la Depresión, sin poder y sin voz.


"And then, when younger people began getting jobs again, back from governement projects and optimistic from the governement checks that became as regular and permanent as the cycle of the seasons itself, her father had gone back to building. But the times weren’t quite right yet and so he waited a few years, and the times never got quite right for him. He was terrified and couldn’t make sense of this terror, so he started drinking."


Quizás uno de los puntos que más me conmueven en la escritura de la Oates, y particularmente en esta novela, es cómo consigue transmitir la vulnerabilidad y la fragilidad de sus personajes. No los idealiza, nos está enfrentando tanto a sus virtudes como sus defectos, y sin embargo, hay una enorme compasión por ellos y esto es algo que captará su lector, o por lo menos, a mi me lo consigue transmitir como pocos autores, a flor de piel, imagino que será que porque ella misma entra en una especie de de trance cuando los habita, los sueña, tal como también expone aquí: "Their lives pressed upon mine eerily., so that I began to dream about them instead of about myself, dreaming and redreaming their lives. Because their world was so remote from me it entered me with tremendous power, and in a sense the novel wrote itself." Para la clase que domina serán them/ellos, e incluso los mismos personajes se refieren en algún momento a ellos mismos como them, distanciándose de ellos mismos, siendo conscientes de esta separación. No se ven a si mismos como us/nosotros, y es algo muy palpable durante toda la novela, estableciendo esta falta de unidad,  porque la unidad familiar también de alguna forma está desestructurada, tal como la clase social de la que provienen. Joyce Carol Oates usó este them en minúscula, conscientemente, como una reafirmación de esta deshumanización y de la lucha de clases. Durante la década de los 60 era prácticamente imposible que un autor se dedicara a abordar a esta clase social, blancos pobres, separados por distinciones raciales, eran invisibles, prácticamente inexistentes en la literatura americana. La Oates lo hizo.


"Walking with her into the other room, he had a kind of hallucination, a flash of a blown-up photograph of himself. He sometimes thought ironically of himself as being photographed, in the act of running. Now the flash came to him, came and went."


them transcurre entre 1930 con las consecuencias de la Depresión y 1969 con los disturbios raciales de Detroit de 1969 y aquí vuelve la autora a enfrentar a sus personajes, la familia Wendall, a temas ya habituales en su narrativa: la lucha por la identidad personal, la supervivencia en una América en la que el desafio por combatir la pobreza estaba precisamente en el ideal del sueño americano, subir una clase social y dejar atrás la de los blancos desfavorecidos que vivían en los extraradios. Los Wendall pertenecen precisamente a esta parte de América silenciada, invisible, la clase trabajadora que vivía en unas condiciones socioeconómicas en la que necesitaban la ayuda de los servicios sociales. En them se retrata sobre todo la década de los 60 pero no desde el punto de vista de las protestas, las marchas, la política o la adicción a las drogas, que era lo habitual en los autores de la época al abordar esta década sino que la Oates la aborda desde el interior de una familia en la que el entorno social no es el protagonista sino que está de fondo siempre presente influyendo en las decisiones y sin embargo, seremos testigos de ello a través de sus personajes principales: Loretta, la madre, y dos de sus hijos, Maureen y Jules.


"That was the end of her youth. She tried no to think of it again."


Esta sea quizás una de las novelas más crudas, más realistas de la Oates y durante sus 500 páginas no deja de metamorfosearse y cambiar de registro, al principio parece una cosa y va mimetizándose en otra y en otra novela continuamente. El comienzo de novela es absolutamente arrollador y crudísimo y ya la Oates no se cortaba un pelo a la hora de presentar ciertas situaciones. En este caso, pareciera que toda la novela fuera a girar en torno a Loretta Wendall, una chica de dieciséis años en un momento de inflexión en su vida, un momento que decidirá el resto de ella y marcará el futuro que tendrá a partir de entones. Estos cuatro primeros capítulos en los que conoceremos a una Loretta, más que enamorada de un chico, enamorada del amor, y que de la noche a la mañana se encuentra corriendo de madrugada por las calles aterrada, no sabremos si huyendo de alguien o huyendo de ella misma, es un momento totalmente antológico  ya en la narrativa de esta autora: “In her yellow cotton-flowered dress she ran, running across the cool coblestones in her bare feet, panting like a cow.” A partir de aquí la Oates elíptica, convierte la novela en la historia de los dos hijos de Loretta, el mayor Jules, y Marianne.


"It drives me crazy the way I always have to move from one place to another. You remember out in the country?  Then we came to Detroit? Then all them dumps, them bus rides? I can"t stand always moving around! I want my  own place, my own house. I want to be like somebody in a movie, I want to get dressed up and walk down the  street and know something  important will happen..."


Se puede decir que en esta novela aunque sea la historia de una familia, los Wendall y de todo el devenir para escapar de la pobreza convirtiendo Detroit en su hogar, realmente tengo la impresión de que la novela solo se centra en tres personajes, para mí capitales, y estos serán el triangulo formado por Loretta y Maureen y Jules. A través de estos tres personajes, JCO explorará la América más profunda y de lo que condiciona haber nacido en una familia determinada con unas condiciones ecónomicas y sociales ínfimas para la supervivencia. "A girl going through the worst experience of her life. They glanced at her and  glanced away. It seemed to Maureen that her life was coming undone. The world was opening up to trap her, she was losing her mind, she was coming undone, unfastened." Tanto Jules como Marianne, magnificamente retratados por la autora, lucharán cada uno a su manera para escapar de las tinieblas que parecen apoderarse de ellos en forma de familia desestructurada en su día a día. Por una parte, Maureen Wendall simbolizará la búsqueda desesperada de seguridad tanto emocional como económica; ha crecido en un mundo caotico en el que la única forma de subsistir es a través de los hombres, y a través de ella, la Oates construye un personaje femenino que tras sufrir la violencia masculina y entrar en una especie de estado catatónico, intentará salir de estas tinieblas cortando no solo con esta estructura familiar sino con la clase social a la que ve como una maldición. Si Maureen es la pasividad y ve en el aislamiento una seguridad, para Jules será justo lo contrario porque él querrá escapar de las limitaciones de su clase y de su familia, saliendo al mundo, sin embargo es evidente que será incapaz de cortar el lazo total con la familia. La rabia y la alienación que él siente, por pertenecer a una clase que le cierra todas las puertas, lo harán involucrarse en conflictos. A diferencia de Maureen, para él los lazos familiares todavía tienen un significado, aunque hay que decir que en Maureen está retratando JCO una mujer que sufre violencia sexual y abuso solo por el hecho de ser mujer. Se puede decir por tanto que Jules incluso en su momento más frágil y débil, siempre tendrá más facilidades y salidas que su hermana Maureen.


"Sometimes his father banged out the back door, sometimes he slapped Loretta's face, sometimes he slapped someone else's face, sometimes he broke a chair or a plate, It hardly mattered. Julen was too old to run away. It was shameful to be always running away. Running away was a mistake. He was too old now to run away but too young to move out."


Puede que sí, que esta sea la mejor novela de la Oates, la novela que mejor la defina por todos los temas que retrata y que desarrollará en posteriores novelas, y porque sus personajes son tratados desde una introspección tan trágica como épica:

- Por una parte, Loretta, la madre atrapada desde los dieciséis años en una vida que no eligió:


"Maureen can hear her, from bed, her mother weeping out in the other room.

What  about my life?, Loretta says. When its going to begin?"


-  Maureen Wendall, a la que en un principio la espera el mismo destino que su madre, y que sin embargo, luchará con uñas y dientes para escapar, como pueda, de un entorno que intenta sentenciar su futuro por el hecho de ser mujer, casi sin esperanza. Maureen será una niña y una adolescente observadora y perfectamente consciente de sí misma, y los momentos en los que la Oates penetra en su mente son absolutamente arrolladores:


"Sometimes when she was alone, walking along the street, she was taken by surprise seeing her refllection  in a store window, a remote, ghostly refllection she never quite expected or recognized; It did not really seem herself."


- Y a través de Jules Wendall, la Oates retratará la vida en las calles, la necesidad de huida continua y al igual que su hermana, por muchas buenas intenciones que pueda tener para su futuro, el entorno en el que ha nacido lo condicionará continuamente aunque su mirada sea mucho más fragmentada, más frágil que la de su hermana Maureen.


"But I think, what the hell, everybody is alone. That's the secret, everybody is alone and can't help It, like right here and now, in this place, everybody is alone and they'd all get up and walk out if they could and never see each other again. We're all like that.”


Hay que decir también que en las cuatro novelas del Cuarteto Wonderland, la Oates usa también narradores masculinos, y en them no solo tendremos la perspectiva de Jules sino la de otro hombre, un padre de familia con tres hijos a punto de tirar la vida familiar por la ventana. Pocas veces he podido leer un retrato de un hombre a punto de serle infiel a su mujer y que resulte tan realista, tan conmovedor. La Oates no lo juzga, todo lo contrario, nos lo presentará y a partir de aquí, el lector se hará cargo...


"He had settled himself into a certain life, to place himself in a certain relationship to his own family and to her family. He had wanted to come to the end of uncertainty. He had wanted an end to the confusion of emotions that had made his adolescence miserable, and frightened him to think that at 34, he had really settled nothing.  He could no control his emotions. They broke and flooded..."


"He was perpetually  waiting for something to happen, anxious that It might happen and that it might not happen. He had no idea what It could be. He had begun waiting for it early in life. It was connected vaguely with the mystery of dreams, those disturbing dreams that seemed to belong to another man but had to be his own."


Joyce Carol Oates nos presenta una novela que transcurre a lo largo de tres décadas y sin embargo no funciona como una novela tipica tópica, todo lo contrario. Coloca a sus personajes en determinados momentos de su vida y se explaya, alarga escenas concretas hasta casi el infinito, para poco después montar una elipsis en la que pueden haber pasado fácilmente diez años, así que se puede decir que la novela está construida sobre unos pocos momentos en la vida de los tres personajes principales, cada uno de ellos una figura esencial que llegará a representar una nación que vendió el sueño americano y que sin embargo ya se encarga la autora, sin edulcorar nada, cruda y realista, en narrarnos esa otra parte invisible, la más desfavorecida. Them es una novela publicada en 1969 y aunque JCO esté narrando una época, un país y unos personajes que parecen muy lejanos del mío, la leo en 2025 y reconozco a los personajes:  conozco alguna Maureen, algún Jules y alguna Loretta. !Todo es tan universal, vigente y humano en la Oates!!!  Quizás la maestría de esta autora esté también en el hecho de que al mismo tiempo nos esté hablando del papel de la mujer en la  creación artística, la lucha por parir historias aunque el papel marcado para la mujer desde siempre sea la de parir hijos. Aquí la Oates se mete de lleno en la metaficción y llegado un punto no sabremos realmente qué es realidad y qué ficción. Una obra monumental.


"Dear Miss Oates,

Years ago I was a student of yours, you don't remember me. I am writing this letter knowing you don't  remember me."


 

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