Available Dark (Cass Neary #2), de Elizabeth Hand
⭐⭐⭐⭐
Available Dark es la secuela de las des(aventuras) de Cass Neary, una ex fotógrafa de mediana edad de las escena punk de los 70, adicta a las pastillas y a su botella de Jack Daniel's, quién todavía no se ha podido recuperar de los incidentes de Maine ocurridos en la primera novela de la serie, Generation Loss, y cuando comienza esta novela ve la oportunidad de darse un respiro y salir de Nueva York en el momento en que un coleccionista de arte le ofrece viajar a Helsinki a tasar unas obras fotográficas.
Empiezo diciendo que Elizabeth Hand desde el momento en que la descubrí, me fascinó; sus novelas tienen ese punto atmosférico e inquietante que me flipan, todo es muy oscuro, muy bizarro y Cass Neary es una antiheroína en todo el sentido de la palabra. Algunas de sus acciones pueden resultar chocantes, pero así es la vida y Cass es muy real en ese aspecto, nunca actúa como una victima y nunca parece arrepentirse de sus acciones. Ante todo sorprende que un personaje femenino sea tan atractivo precisamente por lo inusual y por como Elizabeth Hand deconstruye precisamente a la heroína típica tópica de toda la vida y la imbuye de cicatrices emocionales que se acaban convirtiendo en grandes virtudes, porque ella, Cassandra Neary, no es una jovencita sino que es una mujer de vuelta de la mayoría de las situaciones entre otras cosas porque ya las ha vivido, artista por encima de todo y las referencias culturales, literarias, musicales continuas, no solo son una delicia sino que son totalmente adictivas en el transcurso de sus novelas. Esa sensación de ser una mujer ajada y en casi todos los sentidos baqueteada por la vida, por las drogas y el alcohol, cobran una luminosidad (como pocas veces he visto en un personaje) en el momento en que su visión artística entra en acción y se pone en movimiento. Por cierto, que Cass Neary me recuerda muchísimo al personaje de Saga Noren en la serie televisiva Bron/Broen, salvando ciertas distancias, tanto su aspecto fisico como de alguna forma su forma de vestirse es muy parecida a Cass Neary ¿pura casualidad??, quizás la serie sueca se inspiró en ella, no sé.
La novela que empieza en Nueva York, rápidamente cambia de escenario y cuando se traslada a Helsinki y Reykjavík se reconvierte en una especie de sueño distópico en el que Cass se ve cada vez más envuelta y engullida por lo bizarros de algunos personajes con los que se va tropezando y por el entorno glacial. Es impagable la escena de Cass llegando de noche a Helsinki: ese rollo atmósferico que es una especie de anticipación a nuestro terror a lo desconocido es precisamente el motivo por el cual Elizabeth Hand se ha convertido en una de mis autoras actuales favoritas. El árido paisaje nórdico, áspero y helado, está perfectamente descrito de tal forma que hace cómplice al lector de este desasosiego que siente Cass desplázandose por estos paisajes casi lunares, oscuros y aislados.
Empiezo diciendo que Elizabeth Hand desde el momento en que la descubrí, me fascinó; sus novelas tienen ese punto atmosférico e inquietante que me flipan, todo es muy oscuro, muy bizarro y Cass Neary es una antiheroína en todo el sentido de la palabra. Algunas de sus acciones pueden resultar chocantes, pero así es la vida y Cass es muy real en ese aspecto, nunca actúa como una victima y nunca parece arrepentirse de sus acciones. Ante todo sorprende que un personaje femenino sea tan atractivo precisamente por lo inusual y por como Elizabeth Hand deconstruye precisamente a la heroína típica tópica de toda la vida y la imbuye de cicatrices emocionales que se acaban convirtiendo en grandes virtudes, porque ella, Cassandra Neary, no es una jovencita sino que es una mujer de vuelta de la mayoría de las situaciones entre otras cosas porque ya las ha vivido, artista por encima de todo y las referencias culturales, literarias, musicales continuas, no solo son una delicia sino que son totalmente adictivas en el transcurso de sus novelas. Esa sensación de ser una mujer ajada y en casi todos los sentidos baqueteada por la vida, por las drogas y el alcohol, cobran una luminosidad (como pocas veces he visto en un personaje) en el momento en que su visión artística entra en acción y se pone en movimiento. Por cierto, que Cass Neary me recuerda muchísimo al personaje de Saga Noren en la serie televisiva Bron/Broen, salvando ciertas distancias, tanto su aspecto fisico como de alguna forma su forma de vestirse es muy parecida a Cass Neary ¿pura casualidad??, quizás la serie sueca se inspiró en ella, no sé.
La novela que empieza en Nueva York, rápidamente cambia de escenario y cuando se traslada a Helsinki y Reykjavík se reconvierte en una especie de sueño distópico en el que Cass se ve cada vez más envuelta y engullida por lo bizarros de algunos personajes con los que se va tropezando y por el entorno glacial. Es impagable la escena de Cass llegando de noche a Helsinki: ese rollo atmósferico que es una especie de anticipación a nuestro terror a lo desconocido es precisamente el motivo por el cual Elizabeth Hand se ha convertido en una de mis autoras actuales favoritas. El árido paisaje nórdico, áspero y helado, está perfectamente descrito de tal forma que hace cómplice al lector de este desasosiego que siente Cass desplázandose por estos paisajes casi lunares, oscuros y aislados.
"It was dark when I left New York, dark when the flight landed at 6:00 in Helsinki; dark when I filled through Border Control and got my passoport stamped by a guy who looked like his last job had been checking ID's in Lothlorien. Two hours later, when I finally stumbled from a bus into the slush-covered street in front of the railroad station in Helsinki, it was still dark".
Y cómo no podía ser menos, Available Dark hace alusión a un término en fotografía que se traduce como "Luz disponible" (en este caso lo contrario, muy turbador), que para una fotografía no se se requiere ninguna iluminación adicional como luz estroboscópica o faros sino que es toda aquella que te rodea en todo momento y que te será útil a la hora de realizar tus fotografías. Más o menos sería eso, un juego de palabras con el título de la novela, porque en cuanto ella aterriza en tierras nórdicas se ve envuelta en una especie de agujero negro, no solo físico, sino también por la atmósfera porque como se dice en algún momento "no existe la oscuridad total como tal, sino que siempre hay alguna luz, en alguna parte", porque no nos olvidemos que Cass Neary es fotógrafa y todo gira en torno a unas fotografías que son la clave del misterio, ¿porqué que hay más importante en fotografía que la Luz?. Una delicia en todos los aspectos por todas las referencias artísticas a las que hace mención continuamente la autora.
"-The way you capture light...-I stared at the girl's unseeing eyes, a travesty of the detached gaze all great photographers cultive -I've never seen anything like it. You didn't use a flash gun?
-No, that would have been a petkuttaa, a cheat. Only the flashbulb, I show what the world hides from us, the true world. The sun doesn't lie. The night doesn't lie".
-No, that would have been a petkuttaa, a cheat. Only the flashbulb, I show what the world hides from us, the true world. The sun doesn't lie. The night doesn't lie".
La novela al igual que su personaje, Cass Neary, es muy salvaje, y muy de estos tiempos oscuros y desesperanzadores. Cass no es un personaje fácil, es imprevisible y antisocial, pero para quién de verdad disfrute con estos personajes extremos, a flor de piel, les recomiendo esta serie oscura y turbadora.
"I spent too much time alone, skating on alcohol and speed, not noticing the ice beneath me was rotten and the water killing ".
(Por ahora no está editada en castellano, esperemos que alguna editorial se atreva a lanzarla y no tengamos que esperar hasta que alguna serie de tv la adapte, que quizás llegue, o no... :-(
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