Nido de Arañas, de Elisabeth Sanxay Holding

 


⭐⭐⭐⭐

Ésta es la segunda novela que leo de Elisabeth Sanxay Holding, autora que descubrí con La Pared Vacía, una novela que me entusiasmó y que me pareció muy moderna para la época. En Nido de Arañas ya no es una mujer la narradora, sino que la autora usa el punto de vista masculino para narrarnos una historia que a simple vista puede parecer un noir light y superficial, pero buceando entre lineas, y una vez acabado, te das cuenta de que el fondo de la cuestión no es lo que parece a primera vista y me refiero concretamente al uso de Malcolm Drake como narrador en primera persona.

Malcolm Drake vive en un permanente estado de confusión mental después de una experiencia muy traumática a raiz de que un submarino alemán torpedeara el barco en el que navega como marino mercante. Cuando empieza la novela se ha refugiado en casa de su hermano Arthur que convive con su esposa Helen y la familia de ella. Malcolm que se ha habituado a los barbitúricos y alcohol durante su convalencencia, se ve incapaz de superar el shock sufrido meses antes con lo cual parece haber desarrollado lo que hoy se diagnostica como un Trastorno de Estrés Postraumático. Una noche poco antes de la cena y después de ofrecerle una copa a la tia de su cuñada, ésta cae  muerta. La cruz de culpabilidad que carga desde hace meses, se ve de trastornada de nuevo porque parece ser que todos en la familia le señalan como instigador de la muerte de la tia.

El argumento realmente no es nada del otro mundo, pero lo que sí es aquí muy interesante, es la forma en que la autora consigue trasladarte a la mente de Malcolm. Está siendo narrada en primera persona por un personaje en continúa duda de si mismo, en continuo conflicto con su entorno y cuando comienzan a ocurrir una serie de hechos relacionados con la muerte de la tia Evie, el lector en ningún momento está seguro de la veracidad de los pensamientos de Malcolm: sí es todo resultado de su confusión mental o por el contrario la cadena de acontecimienos no tiene nada que ver con él. Me ha impresionado mucho la forma en que Elisabeth Sanxay Holding nos guía a través de la trama de la mano de Malcolm, un chico débil, inseguro, que es incapaz de decir una frase al completo sin tartamudear a simple vista, pero sin embargo, al ser nosotros testigos de todo lo que pasa por su cabeza, sabemos que su mente aunque confusa, no está inactiva:se crea un suspense, una especie de tensión emocional que va recargando la atmósfera.

Es un noir tirando a minimalista, donde la carga psicológica está en los diálogos que aunque a veces parezcan un tanto surrealistas, tienen un extraño interés. La familia que nos describe aquí Elisabeth Sanxay Holding a veces puede sacarte de quicio porque pueden parecer un tanto superficiales, pero aquí realmente lo que importa es que el argumento parece una excusa para que la autora pueda desarrollar la confusión en la mente de Malcolm. Es una novela rara, y Malcolm es un personaje extraño que durante su lectura no sabes donde te conducirá pero estos recovecos son los que más me interesan en el noir, y Elisabeth Sanxay Holding, es en ese campo una de las autoras más interesantes.

"No sentía nada, tan sólo un cansancio insoportable, un enorme peso en el corazón. No estaba pensando, no quería pensar; quería irse a casa y meterse en la cama. La niebla había espesado y se sentía impotente, aturdido, perdido (...) A lo mejor no comprendo bien las cosas. A lo mejor no recuerdo las cosas. No lo sé. Podría tomarme un par de pastillas y acostarme"

 

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