Dar la cara, de Larry Brown
⭐⭐⭐⭐⭐
"Estuve un rato por ahí con la camioneta. No quería volver a casa aún. Quería huir pero no tenía ningún sitio al que huir. Hay gente que puede largarse sin más, dan la espalda, echan a andar y nunca vuelven la vista atrás. Yo no. Aunque no dejara de pensarlo.”
Si me habeís leído en el blog ya sabeís que Larry Brown es una de mis debilidades desde que lo descubrí el año pasado, así que no voy a enrollarme mucho en esta reseña porque todo lo importante sobre Larry Brown ya lo he mencionado antes en lo que escribí sobre él, pero sigo reafirmándome en lo brutal que es este escritor, en lo cálidos y humanos que resultan sus personajes por muy duro que sea lo que nos estén contando sobre sus vidas. “Dar la cara” (Facing the music), fue el primero de los libros que publicó, en 1988, y no salgo de mi asombro por cómo es capaz de transmitirnos tanta vida, tanta infelicidad y al mismo tiempo tanta esperanza en muchos momentos.
Esta colección contiene diez relatos de personajes que pasan por diferentes fases en sus vidas y el lector tiene la gran suerte, de estar ahí en ese momento, viviéndo estos instantes con ellos, gracias a la maestria de un escritor como Brown. Amores imposibles o rotos, problemas domésticos, alcohol, paro, violencia, no sé, la vida tal cual es, sin edulcorantes pero con la suficiente humanidad para que el lector se sienta en sintonía. Diez relatos que ya cómo es normal en mis hábitos, iba leyendo uno cada noche y no puedo por menos que volver a decir...¡Larry Brown, maestro!!
A continuación una pequeña reflexión sobre estos relatos.
1. Dar la cara: El relato que pone título a la colección y que admito que me voló la cabeza. El punto de vista es el masculino pero realmente es la mujer quién aparentemente se lleva la peor parte... lo que me hizo volar la cabeza fue captar este punto de vista de él, como hombre. Una maravilla.
2. Kubuki a las riendas: Una pareja con un hijo, dónde ella es alcohólica ¿se puede contar mejor la tensión familiar producida por esta adicción? Larry Brown retrata como nadie la naturaleza humana con sus altos y bajos. Leo por ahí que Dylan, muy fan de Larry Brown, usó una cita de este relato para su canción Sugar Baby: Lots of places to hide things (if) you want to hide them bad enough.
3. Los Ricos: El señor Pellisher debido a que trabaja en una agencia de viajes se relaciona con gente con mayor poder adquisitivo que él, gente rica que se lo puede permitir casi todo. Una reflexión sobre ellos comparado con su vida.
4. El viejo Frank y Jesús: Este relato me llegó al alma. Un granjero, veterano de guerra, desesperado y cansado y de cómo somos testigos de sus reflexiones sentado en un sofá. Joya.
"Pero a
decir verdad al señor P le preocupa todo bastante. Se pasa todo el
santo día preocupado. Es muy probable que no pase un solo minuto,
estando despierto, en que no haya alguna cosa que le preocupe. Es
como si cargase con un peso del que no va a poder librarse ni aun
queriendo porque no hay manera de quitárselo de encima."
5.
Niño y perro: Un relato en forma de poema y de cómo la infancia
conserva una cierta inocencia a pesar de la dureza de la vida.
6,
Julie: un recuerdo: Para ser un relato de sus inicios yo diría
que es un cuento maestro sobre Larry Brown experimentando con la
forma. Cada frase pertenece a una linea temporal diferente y así y
todo el lector que participa activamente, lo va captando todo. Una
genialidad de relato
7, Samaritanos: Otro relato de
los que se me quedará grabado. Tiene su punto de humor, pero eso no
signfica que sea menos duro. El narrador tomándose una cerveza
sumido en sus problemas, es testigo de una situación que impactará
al lector, igual que le impacta a él. Grande!!
8, Vida
Nocturna: Encuentros en un bar y a partir de aquí, Larry Brown
construye una historia que podría ser como la de cualquiera de
nosotros:
“Me doy cuenta
de que hay algo que le molesta. Solo quiere que la dejen en paz. No
quiere bailar. Tiene su propia botella y su propia mesa, sus propios
problemas de los que yo no sé nada.”
9,
Adiós a la ciudad: La historia de otro encuentro contada desde
los dos puntos de vista: la de él y la de ella. A veces me sorprende
la forma en que Brown es capaz de darnos tanta información sobre los
estados emocionales de sus personajes en tan pocas páginas.
Personajes desesperanzados en crisis y sin embargo, hay un momento
determinado que gracias a un encuentro inesperado, surge un resquicio
de luz.
10. El fin de una historia de amor: la historia de
una pareja que está ya rota, y el punto de vista de él, es tan
directo y cercano, que cuando llega el final, no puedes por menos que
sonreir. Larry Brown tiene una habilidad asombrosa por mezclar la
infelicidad con estos resquicios de luz y de humor. Brillante final
para una colección asombrosa. Te adoro Larry!!
La traducción es de
Javier Lucini.
"Si ella se largaba podría irme a
casa, abrir todas las puertas, poner la música a todo trapo, ser
libre. Si se me antojaba podría dormir por el día y volver a
escribir por la noche, sin parar durante ocho o diez horas
(...)
Todo volvería a ser diferente y lo mismo"
Buen resumen.
ResponderEliminarAcabo de terminar de leer el libro, explorando nuevos géneros literarios a los cuales estoy acostumbrado, sin embargo la narrativa en la que Larry Brown escribe estos 10 cuentos me pareció fascinante.
El único cuento que no terminé por conectar fue el 8, Vida Nocturna. Me cuesta trabajo interpretar el final. Espero puedas compartir tu interpretación del final de este particular cuento.
Saludos.