Destellos de Belleza, de Jonas Mekas

 


⭐⭐⭐⭐

♫♫ ♫ Sunday Morning, The Velvet Underground   ♫♫ ♫

 

"Lo más relevante que escuché la semana pasada fue cuando Rossellini dijo que la educación es un esfuerzo. Que para aprender algo hay que hacer el esfuerzo por aprenderlo: nada que valga la pena sucede sin esfuerzo. Las cosas hay que buscarlas. Acercarse a ellas. Abrírseles."


El título original de este libro es "A Dance with Fred Astaire",viene del primer relato de estas memorias en forma de postales de Jonas Mekas, y sin embargo y a pesar de lo hermoso de este título, me parece tan acertado el titulo elegido para la edición en castellano, Destellos de Belleza, porque estos destellos de belleza son precisamente la esencia de la obra de Jonas Mekas: pequeños destellos en forma de diarios de su vida que tuvieron su origen en esa película-diario absolutamente perfecta de cinco horas de duración I Was Moving Ahead, Occasionally I Saw Brief Glimpses of Beauty, que se podría traducir como mientras avanzaba, ocasionalmente vi pequeños destellos de belleza. Es una película editada a partir de las imágenes de grabaciones de Mekas a lo largo de 50 años de su propia vida. Jonas Mekas lo grababa todo, su vida era el cine en forma de creador y también de archivista y critico de cine del Village Voice. Se convirtió en uno de los fundadores de la Cooperativa de Cineastas, del Anthology Film Archives y de la revista Film Culture. Con sus películas sin actores, grabando la vida misma, en las que el argumento era lo menos importante y mucho menos la duración o la técnica cinematográfica, Mekas quiso acabar con el artificio de Hollywood.


"Ambos estaban obsesionados con el cine y, al igual que Adolfas y yo, su calle favorita de Nueva York para ver películas era la 42nd Street, donde cada noche se podían ver al menos treinta películas diferentes, ya que proyectaban las veinticuatro horas al día. Andrew, Eugene, un polaco chiflado llamado Eduardo, Peter Bogdanovich y yo nos sentábamos en esos cines hasta que nuestros ojos no aguantaban más."


Jonas Mekas llegó en 1949 a Nueva York acompañado de su hermano menor Adolfas cuando solo tenia 27 años, ambos exiliados de Lituania, tras huir de la persecución de los nazis y los soviéticos. Hay un momento maravilloso en el capítulo titulado El comienzo de todo: Mi primera cámara de fotos, casi al final del libro donde cuenta como con dieciséis años recibió un regalo de su hermano mayor: una cámara de fotos. Fue en el verano de 1940, precisamente cuando los rusos ocupaban Lituania. El joven Jonas probando su cámara, se vio interrumpido por un soldado ruso que extrajo ese primer y único rollo y lo destruyó mientras le gritaba al joven Jonas: “-Corre, corre, estúpido, o ya verás…”. Jonas corrió con la cámara en las manos, y aunque fue una experiencia fallida, no se puede decir que no fuera demoledora. A partir de entonces, la cámara llegó a ser una especie de extensión de sí mismo.


"Nos acostumbramos a buscar en el cine 'arte', o buenas historias, dramas, tal como lo hacemos en la literatura. ¡Por qué no nos olvidamos de la literatura, el teatro y Aristóteles! Contemplamos el rostro de una persona en la pantalla, el rostro de MM, mientras cambia y reacciona. Sin dramatismo ni ideas, solo un rostro en toda su desnudez y con todas sus sombras (...) no es otra cosa que el significado del mundo."


Quién conozca el cine de Jonas Mekas y se sumerja en este libro, completará momentos porque Jonas Mekas es un creador lleno de vida, de sentido del humor, un humanista en toda regla, una especie de hombre del renacimiento, libre y sin ataduras formales. En Destellos de Belleza convierte en texto lo que ya conocíamos por sus imágenes: momentos fugaces con amigos, encuentros de un instante, espacios conectados con la naturaleza, memoria de una vida. Hay momentos maravillosos en torno a la gente que conoció, amigos, anécdotas en torno a ellos, y quizás de todas la que más pudo conmoverme fueron las páginas que le dedicó a la inigualable Barbara Rubin:


"Me dijo que tenía una sobrina que amaba el cine y había sido liberada hace poco de un reformatorio de menores.
Y vino. Frágil., muy joven, completamente asustada y totalmente callada. Todavía seguía en estado de shock. Solo se limitaba a observar, escuchar, asentir, y de vez en cuando, sonreír tímidamente. Era una persona muy, muy sensible y extremadamente receptiva. Pero no decía una palabra."

[...]

Entonces ella abrió la boca. Pero no para romper el silencio: más bien para atravesarlo como una fiera. Con la fuerza de un torrente desgarrado y entrecortado de palabras contenidas por mucho tiempo.
Ahora que lo pienso, su manera de hablar siempre tuvo esas pausas casi dolorosas, como si hubiese demasiadas palabras en su mente y no pudiera decidir cuáles utilizar. "


En definitiva, una colección fantástica y conmovedora de momentos en la vida del genio que fue Jonas Mekas. Las memorias, el diario personal, las reflexiones en torno a la vida, sus ideas en torno al cine libre sobre todo, son como un collage de alguien que dedicó su vida al arte. Jonas Mekas fue un hombre profundamente comprometido con el arte, con los artistas libres, y sumergirse en algunos de los momentos de su vida, convierten este libro en una lectura deliciosa. Destellos de Belleza está llena de sentido del humor, de amor por el arte y sobre todo es un canto a la vida.

El lector que llegue a este libro antes que a su cine, seguro que se morirá de las ganas por ver sus películas. Estoy segura.

La traducción es de Pablo Marín.


"Me gustaría algún día tocar este planeta con mis pies descalzos y no solo con mi cámara. ¿O acaso mi cámara son mis pies?"

 


As I Was Moving Ahead Occasionally I Saw Brief Glimpses of Beauty, 2000,

 Jonas Mekas

 





As I Was Moving Ahead Occasionally I Saw Brief Glimpses of Beauty 2000, Jonas Mekas






Reminiscences of a Journey to Lithuania, 1972, Jonas Mekas 2

 



Jonas Mekas



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