La ruina de Kasch, de Roberto Calasso

 


 ⭐⭐⭐⭐

 ♫♫♫ November - Max Richter ♫♫♫

 

"Pero algo tengo que hacer,: entonces me encierro y leo, con un frenesí  que me hace estremecer con frecuencia, de noche, cuando me sorprendo insultando en voz alta a seres extinguidos y sin embargo horrendamente activos."


El título La ruina de Kasch hace referencia a una leyenda africana de Sudán, que Calasso rescata para construir una especie de tratado en torno a la naturaleza del poder y su transitoriedad,  la inevitabilidad de la corrupción que lo acompaña y su legitimidad y sobre todo y una vez abierto el melón, sobre todo se detiene en un tema eternamente obsesivo para él: el sacrificio. Antes de referirse a la leyenda del derrumbe de Kasch, Calasso usa a Charles Maurice de Talleyrand-Périgord —embajador, obispo, consejero de reyes, estadista conspirador y actor clave en la historia de la legitimidad política—, conocido por todos simplemente como Talleyrand. Calasso de alguna forma noveliza la vida de Talleyrand, rescatando citas, viajes, mezclando hechos del mundo real con crítica y ensayo literario, filosofía, en un intento por situarnos en el viejo mundo. Nos sitúa en el viejo mundo justo en una época que tras la Revolución Francesa cambia la mentalidad, y ahí está esta figura tan compleja como Talleyrand para mimetizarse y camuflarse cual camaleón para ir acomodándose a los tiempos. Talleyrand siempre tuvo la capacidad de ver los acontecimientos históricos con perspectiva e incluso manteniendo una distancia respecto a estos acontecimientos, viendo venir los rios de sangre.


"Nos movemos hacia un mundo desconocido sin piloto y sin brújula; hay una sola cosa cierta, y es que esto terminará en un naufragio.

Revolucionaria, para Talleyrand, es una era en la que los hechos y las palabras, desvinculados de cualquier dependencia y arrojados como proyectiles, pesan continuamente sobre la vida, la plasman con rudas yemas, la obligan a ser reacción."


Talleyrand es la figura que víncula, ese lazo entre lo viejo y el mundo moderno que estaba llamando a la puerta y que Calasso quiere visibilizar a toda costa. Yo no conocía la figura de Talleyrand aunque si a algunos de sus contemporáneos como Chateaubriand pero puedo entender porque Calasso lo haya elegido para narrarnos el paso que va de los rituales y sacrificios antiguos hasta la revolución y el comienzo de la modernidad. Talleyrand puede proporcionar la clave de cómo pudo sobrevivir durante la Revolución Francesa adaptándose, y para ello Calasso lo rodea de personajes y citas, hasta que nos narra la leyenda de la ruina de Kasch que sirve como ejemplo práctico para lo que Calasso nos quiere hacer ver. La leyenda de la ruina de Kasch queda registrada por el antropólogo Leo Frobenius en 1911, tal como le fue narrada por un desconocido. Trata de un antiguo reino que basaba su supervivencia en el sacrificio periódico del rey, determinado por los sacerdotes que se guiaban por la posición de las estrellas en el cielo. Sin embargo, un día llega un extraño de Oriente, Far-li-mas, que tiene un gran talento narrando historias e hipnotizando a quienes las escuchan. Su hechizo al narrarlas es tan abrumador, que los que controlan esta sociedad, osea los sacerdotes, se olvidan de mirar el cielo y llegado un punto ya no se sacrifica al rey. A partir de aquí, deviene el derrumbe de Kasch. Esta historia sirve como un patrón para relatar el acenso y caída de los gobernantes, y establece un paralelismo con lo que se va repitiendo en las diferentes épocas y civilizaciones, y no hay duda que vamos a encontrar similitudes con lo que está ocurriendo ahora mismo en el mundo.


"Una vez, en una carta enviada en 1809 desde Ginebra, Madame de Staël supo decir a Talleyrand las únicas palabras que habrían podido traspasar su invisible coraza: Adiós. ¿Sois feliz? Con un espíritu tan superior, ¿no vais a veces, al fondo de todo, es decir, hasta el dolor?


Sin entrar en más profundidad, porque entre otras cosas, quizás de los libros de Calasso, este puede ser el que más me ha costado por todos los análisis filosóficos en los que se embarca hacia la segunda mitad, si que tengo que admitir que resulta fascinante la erudición de Calasso por cómo va cambiando los giros y haciendo surgir todos estos pensadores, filósofos, artístas y corruptos enganchados al poder que pueblan las páginas de este libro. Calasso crea un texto saltando entre historias que van desde la Revolución Francesa hasta la Primera Guerra Mundial. Ensayo, historia, novela, filosofía, se podría encuadrar en cualquier género, pero sobre todo es un texto arrollador y esencial para quién le interese entender de dónde viene el mundo moderno, y quizás hacia dónde va...


"He aspirado una vida nueva, como los criados que frecuentemente aspiran perfumes cuando abren la puerta de un salón. Esa embriaguez suspendida duró poquísimo. El hielo volvía a caer: Mañana veremos llegar el alud, el triste alud de los hombres de Estado."

 

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