Zorro, de Dubravka Ugrešić

 


  ⭐ ⭐⭐⭐

 

 ♫♫ ♫   Everyone is a ghost, Monster Movie  ♫♫ ♫

 

 "Tengo la impresión de que usted está en un estado permanente de rebelión interna. Se le nota en la cara cómo se queda enganchada a todo; no logra pasar sin que algo la roce. Está en fricción permanente con el entorno. Constantemente clama por la justicia. Y la justicia no existe, supongo que ya se ha dado cuenta. La obsesiona la sensación de que, por mucho que haga, ya no es visible, de que no existe..."


Sin tenerlo planeado, como me ocurre últimamente mucho en cuanto a lecturas elegidas, salgo de La mujer del teniente francés” que es una novela sobre cómo escribir una novela, y me sumerjo en este texto de la Ugresic que no es una novela pero realmente también es una obra sobre la escritura, con lo cual vuelvo a embadurnarme de pura metaficción….vida y arte, y repito, sin haberlo planeado. También vengo de leer Nabokov y su Lolita, una novela embaucadora como pocas y aquí Dubravka Ugrešić le dedica un capítulo entero a Nabokov, sus mariposas y un viaje que hizo por América mientras una de sus estudiantes, Dorothy, ("Neonympha dorothea dorothea"), le servía de chófer, un viaje que le sirvió como experiencia para su Lolita. Con esto quiero decir, que últimamente mis lecturas se componen de coincidencias y no sé cómo una me lleva a la otra pero lo que me asombra es que suelen estar conectadas dentro de lo caótico de las elecciones. Con Dubravka Ugrešić se aúnan estas coincidencias o casualidades o simplemente conexiones: la metaficción, el autor como gran embaucador (relacionado en ese zorro del título, que se repite una y otra vez durante el texto), la construcción de una obra artistica.


"Los zorros son criaturas solitarias. Les gustan los espacios abandonados, añadió un poco ausente."


Zorro está repleto de escritores, obras, referencias literarias que la Ugresic relaciona continuamente con lugares y personas del ahora mismo, de lo contemporáneo, y hasta tal punto llega el embaucamiento de Dubravka Ugrešić que me pregunté durante la lectura ¿qué ha sido ficción y qué autobiografía en Zorro?? Hubo momentos en los que si me llama la atención un dato y uso internet para investigar y me doy cuenta de que ese libro o ese autor que menciona (hasta ahora desconocido para mí) realmente existieron, pero hubo otros momentos que investigué otros datos y sin embargo, no encontré información. La gracia está en que la autora camufla tan bien lo real con lo inventado, que construye una especie de ensayo sobre historias, que finalmente no supe si hablaban realmente de ella o todo fue un invento, pura ficción. Me asombra haber llegado al final de este libro sin estar segura de ello, pero al mismo me ha maravillado como la simbiosis de personajes ya sean ficticios o reales, lugares, personajes que resucita en pequeñas historias, hayan conseguido dar a luz un libro tan especial.


"Vivía a orillas del mar Negro, en la ciudad de Varna, iba al liceo, adoraba las películas y los libros ( ¡particularmente las novelas con nombre y apellido femenino en el título!)..."

[...]

"...apearse unos kilómetros antes de Zagreb y encontrarse en la oscuridad de una estación de tren de provincias sumida en la desolación y el abandono. Allí no la esperaba nadie. Esa estación oscura y abandonada se grabó en el corazón de mi madre como un hierro candente, como la primera traición dura y dolorosa."


Dubravka Ugrešić combina historias personales sobre su madre al inicio con un capítulo entero dedicado a su sobrina hacia el final mientras lo mezcla con observaciones sobre el día a día, sobre sus asistencias a conferencias y la forma en que traba conocimiento con gente que pasaba por allí y y que ya no volverá a ver pero que le dejan un poso; reflexiona sobre el trauma de la guerra en la antigua Yugoslavia que la convirtió en una exiliada croata afincándose en Amsterdam, pero al mismo tiempo enlaza historias que transcurren en Japón, Nápoles con Rusia o con la misma Croacia y entiendo que puede resultar una autora incómoda en su país porque cuando aborda la cuestión de los refugiados, el feminismo, el mundo académico y el editorial, la corrupción imperante tanto en la ex Yugoslavia como en la actual Croacia, el exilio etc, lo hace siempre desde una perspectiva muy penetrante y aguda. No es una autora complaciente, todo lo contrario…


Nuestras relaciones con otras personas son tóxicas nuestro entorno es tóxico, los alimentos que comemos son tóxicos. Tóxico es la palabra clave de nuestro tiempo."

[...]

"-Y sin embargo no me pregunta cómo los jueces croatas se han trocado de jueces en delincuentes!! ¡Pues ya ve, no fue Albert Einstein el que llegó al poder en este país, sino unos vulgares delincuentes!"

[...]

"-Y yo me he cansado.
-¿De qué?
- Del entorno, de la eterna estupidez y de la grosería. La estupidez y la groseria son un cóctel mortal. Los nuestros no son amables, morirían antes de proferir una palabra amable. Somos una cultura campesina, la gente está convencida de que en cualquier gesto amable acecha el chantaje o el engaño."

[…]

"Hoy en día el festival literario no se diferencia mucho de las ferias medievales, en las que el público pasea de una carpa a otra, del tragafuegos al juglar. Los escritores hoy ya no molestan al público con lecturas, sino que llevan a cabo una suerte de espectáculo. El público educado con la tv e Internet, es literariamente cada vez más analfabeto y busca un entrenimiento rápido e inequívoco..."


El texto está dividido en seis partes, claramente diferenciadas, que podrían ser pequeños ensayos o divagaciones pero, realmente son pequeñas historias relacionadas unas con otras en el espacio, y el título de la primera sección, el primer cuento, creo que sienta las bases sobre esta metaficción “Un cuento sobre como se crean los cuentos”, que a la postre será una reflexión continua sobre este tema de la creación artística. Dubravaka toma el título de su primera historia de un cuento del escritor ruso Boris Pilnyak, y es una primera sección que me ha maravillado por cómo relaciona los personajes de este cuento de Pilnyak con sus propios padres y los recuerdos de su vida. Se desvía una y otra vez del cuento de Pilnyak para abordar su vida, sobre todo su madre. Realmente es un comienzo arrollador.


“Nunca se le ha ocurrido que existen personas con la goma de borrar preparada para borrarla; personas dispuestas a clavarle el puñal; personas dispuestas a pisotearla... ¿Por qué? Simplemente porque usted es un poco más visible que ellas, mide un centímetro más que ellas. La mayoría de la gente no lo soporta. No tiene hijos, no es una inválida, no es suficientemente fea y no está casada, es mujer, se ha echado al monte, canta, no rinde cuentas a nadie, todo esto es un superávit de libertad, que no se perdona fácilmente."

"- Las mujeres clamamos por tener conversaciones -dijo-, Se trata de un hambre que dura ya siglos. Algo que no les sucede a los hombres. Ellos mantienen una conversación constante. Con otros varones, por supuesto."


También resulta iluminadora la forma en la que Dubravka Ugrešić aborda el tema de la mujer en el mundo sobre todo literario, lanzando ejemplos a lo largo de todo el texto pero sobre todo en la segunda historia El Arte del equilibrio, donde la viuda de un prestigioso escritor ya fallecido, a quién conoce durante unas conferencias, y casi sin haber escrito una linea en su vida, es mucho más popular que los asistentes a esa conferencia literaria. La agudeza de Ugresic a la hora de definir estos tiempos en los que si no brillas llamando la atención más que por cuestiones más internas, no eres nadie, se convierte en una especie de repetición a lo largo de todo el texto. Y me gusta la forma en que la Ugresic aborda el feminismo, sin aljaracas, sin banderas llameantes simplemente relatando historias del día a día, de momentos en un avión, o en un banco hablando con alguien.


"- A mi me respetan los hombres. ¿Por qué? Porque sé cual es mi -sitio-. Yo he servido y complacido obedientemente el talento literario de un hombre, he servido a la mente masculina, soy, por lo tanto, la dream girl de muchos varones, soy también su viuda potencial. Para Levin he sido secretaria, archivera, editora, esposa, agente...No he vuelto a casarme, he seguido sirviéndolo después de su muerte..."


Cada una de las seis partes de este libro aunque no sean una novela, si que podrían formar pequeños cuentos que forman una especie de collage donde toca múltiples temas, pero siempre exponiéndose a sí misma, desnudándose emocionalmente, así que aunque haya mucho de ficción aquí, yo diría que a mi no me ha embaucado en momentos concretos en los que Dubravka Ugrešić se desnuda totalmente frente al lector. Películas, libros, datos históricos, ficción y finalmente, ella, Dubravka Ugrešić hablando de cómo dar a luz una novela usando un narrador que aunque parezca anónimo debe tener mucho de ella misma, aunque aquí está la gracia de lo que nos cuenta, poder distinguir la ficción de lo real, aunque ¿es realmente importante o necesario saber distinguirlo???. La verdad es que últimamente me están flipando estas autoras croatas a las que quiero seguir descubriendo y Dubravka Ugrešić es una de esas autoras politicamente incorrectas, a veces tan seca como una cuchilla de afeitar y así y todo profundamente conmovedora en muchos momentos. No la dejéis pasar.

Traducción de Luisa Fernanda Garrido y Tihomir Pistelek.


"Bueno, las escaleras no eran la verdadera causa, el pinzamiento en la espalda va a la par con otras señales menos palpables: una inquietud interior que no tiene causa visible, la sensación de malestar inconsciente debido a la situación en la que nos encontramos metidos en contra de nuestra voluntad, la sensación de engaño que apenas se intuye en el aire, como la lluvia."

 

 

Comentarios

Entradas populares de este blog

Yo navegué con Magallanes, de Stuart Dybek

Respiración artificial, de Ricardo Piglia

X (Erasure), de Percival Everett